domingo, 9 de mayo de 2010

Un calamar hundido

El sábado 8 de mayo será seguramente un día que los hinchas del Club Atlético Platense no podrán olvidar. Luego de una pésima campaña, él “marrón” descendió a la primera B. Esta fea situación Platense la había sufrido por última vez en el 1998. Por Agustín Rozemberg

Platense tenía la oportunidad de mantener la categoría enfrentándose al complicado equipo de Quilmes, que con el triunfo ascendía a la Primera División del futbol argentino. El equipo del sur fue superior en varias instancias del partido y gracias a su gran arquero Trípodi consiguió llevarse un punto del estadio Ciudad de Vicente López, quedando segundo en la tabla de posiciones detrás del ya ascendido y campeón Olimpo.

El encuentro finalizó 1 a 1 y los goles los marcaron Diego Ceballos(Platense) a los 18 minutos del primer tiempo dándole una parcial victoria a su equipo, y luego Miguel Caneo(Quilmes) de penal lo empató y selló el resultado final. En el final del partido, se fue expulsado Brian Roberts, uno de los mejores jugadores que presentó el equipo de Pascutti durante la temporada.

En los primeros minutos del primer tiempo, “tense” tuvo más el balón y genero chances muy claras, pero luego el partido se fue emparejando y el “cervecero” tuvo muchas oportunidades de marcar pero no las supo aprovechar. El segundo tiempo fue apasionante y se vivió con mucha tensión, ya que los dos equipos se jugaban cosas muy importantes. Los dos pudieron llegar al arco rival, pero fallaron en el último tiro y se quedaron con las manos vacías.

Finalmente, vale recordar los lamentables hechos que sucedieron al principio del segundo tiempo dentro de la tribuna local, que luego se trasladaron a la parte exterior de la cancha.

Una pregunta que nos hacemos todos los amantes del futbol y los que van en familia pasivamente a alentar a sus equipos: ¿Hasta cuándo los violentos van a seguir teniendo protagonismo en el fútbol? Esperemos que las autoridades de la AFA y los dirigentes de los clubes tomen conciencia del problema que nos está afectando a todos y hagan algo al respecto para que ir a la cancha sea como en la antigüedad y como en los países de Europa, una verdadera fiesta y sin violencia de por medio.

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